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Palabras que usamos mal

Me recomiendan este enlace, en el que encontraremos un montón de palabras que no siempre utilizamos correctamente según su significado

El dardo de la palabra

Cuando, como, quien, donde y cuanto

Pretendemos ser prácticos, ¿no? Así que vamos a dar una sencilla pauta para saber cuándo escribir con tilde estas palabras.

En general, tendremos que poner la tilde cuando expresen interrogación, pero como esto no implica necesariamente que existan interrogaciones físicas que nos sirvieran para asegurarnos, basta con aplicar las siguientes reglas:

· “Cuándo” llevará tilde cuando pueda ser sustituido por “en qué momento”:

“¿Cuándo llegarás?”

“Me preguntó cuándo podría recibirle”

“Le contesté que cuando terminase el documento”

· “Cómo” llevará tilde cuando pueda ser sustituido por “de qué manera”:

“¿Cómo piensas arreglarlo?”

“Intenté averiguar cómo lo habría logrado”

“Conducía como si fuese una carrera”

· “Quién” llevará tilde cuando pueda ser sustituido por “qué persona”:

“¿Quién ha llamado?”

“Hace falta saber quién se atrevería a hacerlo”

“Elegí a quien me pareció más inteligente”

Esto es aplicable al plural: “quiénes”

· “Dónde” llevará tilde cuando pueda ser sustituido por “en qué lugar”:

“¿Dónde vamos a cenar?”

“Le dije la hora, pero no dónde quedábamos”

“Decidí acudir al mismo lugar donde había pasado las vacaciones”

· “Cuánto” o “cuántos” llevarán tilde cuando pueda ser sustituido por “qué cantidad”:


“¿Cuántos vamos a cenar?”

“Ni me fijé en cuánto costaba”

“Era increíble que cuanto más corría, menos cansado parecía”


"Él" y "el"

Aunque pueda parecer demasiado básico, insisto en que esta guía pretende abarcar un amplio espectro de lectores.

No hace falta extenderse mucho:

· “Él” llevará tilde cuando se trate de un pronombre personal, es decir, por dar una pauta fácil de aplicar, cuando podamos sustituirlo por un sustantivo:

Decidió que era mejor para élàDecidió que era mejor para Antonio

· Cuando se trate de un artítulo determinado, no llevará tilde, precederá a un sustantivo y en muchas ocasiones podrá ser sustituido por “un” sin que la frase pierda sentido, aunque, naturalmente, pueda alterar su significado:

Se le olvidó el bolígrafoàSe olvidó un bolígrafo

Como estamos viendo a lo largo de esta guía, el uso de la tilde para diferenciar palabras que se escriben y pronuncian igual no suele ser gratuíto, y evitan errores de interpretación:

José dijo que debería haber pagado el mismo

José dijo que debería haber pagado él mismo

En la primera frase, José indica que debería haber pagado alguien que ya lo había hecho anteriormente, sin que sepamos si había sido él o no, aunque todo parece indicar que se refiere a otra persona.

Con la tilde, sin embargo, la misma frase indica que José dice que es él y no otro quien tendría que pagar…

Gentilicios e idiomas

Por mucho cariño que le tenga uno a su ciudad, región o patria, los gentilicios y nombres de idiomas van en minúsculas:

“-Nací en Segovia, pero me siento madrileño.

La mayoría de los presentes eran españoles.

Al cabo de un mes, ya dominaba el francés”.

Sin embargo, no hay que confundir el gentilicio con: “Aunque nacido en La Habana, le apodaban el Español.” En este caso, se refiere a un apodo, que se escribe en mayúsculas, como si se tratase de un nombre propio.

Una salvedad podría ser cuando nos referimos a toda una nacionalidad en simgular: "el Pueblo Español", pero nunca "los Españoles", sino "los españoles"

Organismos oficiales

Cuando nombramos un organismo oficial, éste se escribe en mayúsculas:

"Nos acercamos al Ministerio de Cultura."

Al igual que el responsable de dicho organismo, siempre que no se incluya su nombre:

"Ésas fueron las declaraciones del Ministro."

"Ésas fueron las declaraciones del ministro Pérez Rubalcaba."

Aunque no hay que confundir esta regla cuando no nos referimos a un organismo oficial o su responsable en concreto:

"Ocurre lo mismo en cualquier ministerio."
"Prefiero un puesto de conserje que de ministro.", "vive mejor que un ministro."

Ni tampoco confundir con cargos, graduaciones, etcétera:

"El almirante Carrero Blanco fue brutalmente asesinado."
"El sargento Peláez recibió la medalla al mérito."

El punto y aparte en un diálogo

En el caso de que el diálogo sea extenso, o el escritor considere que debe introducir un punto y aparte, el siguiente párrafo no comienza con guión, sino que lo hace con la llave, " »".
El motivo es el de indicar sin lugar a dudas que sigue hablando el mismo personaje:

"-Debo procurar no extenderme -dijo él-. El motivo de que el proceso industrial... (seguiría el texto hasta el punto y aparte) .
 
»Pero eso no es todo -añadió-, sino que también hay que tener en cuenta el coste de investigación."

Como puede observarse, el resto de la estructura es idéntica a la de un diálogo normal. Es decir, la única diferencia es que el siguiente párrafo (y sucesivos, si los hubiera) comienza por la llave " »".

Estructura de los diálogos

Los diálogos, para diferenciarlos de la narración, van precedidos por una raya ("—" distinto del guion, o símbolo menos, "-"), y nunca terminan en raya, sino en el signo de puntuación correspondiente: punto y aparte, cierre de interrogación, cierre de exclamación o (menos habitualmente) dos puntos o punto y coma.

"Estoy algo cansado."
Obsérvese que no hay espacio entre la raya y la primera letra.

Para introducir una aclaración del narrador, se utiliza también la raya:

"—Estoy algo cansado dijo él."
"—Estoy algo cansado dijo él. Me voy a mi casa."

Teniendo en cuenta que hay que diferenciar dos casos:

1.-La intervención del narrador hace referencia a un verbo o acción del habla o el pensamiento ("dijo él", "pensó ella", "replicó su amigo", etc.).
  • Se deja un espacio en blanco entre el final de la frase y la raya, y la frase del narrador comienza sin espacio entre la raya y ésta: "cansado dijo él."
  • La frase comienza en minúsculas: dijo él."
  • El signo de puntuación correspondiente a la frase del personaje se cierra tras la aclaración del narrador: "—Estoy algo cansado dijo él. Me voy a mi casa."
  • Si el diálogo continúa, se cierra con la raya; en caso contrario, no: "—Estoy algo cansado dijo él. Me voy a mi casa."
  • Si la frase del diálogo no está completa, pero le correspondería otro signo de puntuación (como una coma), éste se pone como en el ejemplo anterior con el punto: "—Estoy cansado —dijo él—, y eso que he dormido bien."
2.-En el caso de que el comentario del narrador no tenga nada que ver con la acción de hablar, pensar o cualquiera de acciones relacionadas (gritar, susurrar, etc.), se cierra la frase, si hiciera falta, y el texto del narrador comienza por mayúscula:

—Tengo que irme. -El portazo retumbó en toda la casa.

(Esta aportación se la debo a Iván, gracias a sus comentarios).

Y contando con ciertas excepciones:
  • La exclamación y la interrogación se cierran siempre (si la frase ha terminado) antes de la raya: "¿Estás cansado? dijo su mujer—. Puede que debieras dormir más."
  • Del mismo modo, también los puntos suspensivos preceden a la raya: "Te noto cansado... observó ella. Será que no duermes bien."
  • Si la narración precisa dos puntos, éstos sustituyen al signo de puntuación que correspondería a la frase del diálogo: "Te noto cansado observó ella, y añadió: Será que no duermes bien."


"Más" y "mas"

No hace falta extenderse mucho, y es algo que todavía recuerdo de los lejanos días de colegio; "más" llevará tilde siempre, salvo cuando pueda sustituirse en la frase por "pero":
  • "No puedo más", "cuatro más cinco son nueve", "había más de veinte camiones"
  • "Lo intenté, mas (pero) no pude"

Cuando la coma precede al "que"

Hay ocasiones en las que no sabemos si en la frase:

"El hombre que portaba una antorcha dio un paso adelante"

... debe ponerse una coma antes de "que".
Tal y como lo hemos escrito en primer lugar (sin coma), la frase da a entender que había más de un hombre, y que el que portaba la antorcha es el que dio un paso adelante, es decir, que portase una antorcha se utiliza para diferenciarle del resto. Sin embargo, con coma:

"El hombre, que portaba una antorcha, dio un paso adelante"

Vemos que la coma ha hecho que "que portaba la antorcha" se convierta en una característica del sujeto que no implica que hubiera más junto a él. Se podría sustituir por "El hombre portaba una antorcha y dio un paso adelante"